Las adicciones, ya sean a sustancias o comportamientos, son un fenómeno complejo y multifacético que afecta a personas de todos los ámbitos de la vida. En el núcleo de muchas adicciones, encontramos una serie de creencias profundamente arraigadas que sustentan y perpetúan este comportamiento adictivo. Estas creencias pueden variar ampliamente, pero comparten la capacidad de ejercer un poderoso control sobre la mente y las acciones de quienes luchan contra la adicción.
En este post, exploraremos algunas de las creencias más comunes que subyacen a las adicciones y analizaremos sus denominadores comunes.
Denominadores comunes de las adicciones
Y es que, el denominador común de toda adicción reside en el propio adicto, pues estos se dan a su adicción para alterar o huir de su estado de ánimo, el cual les resulta intolerable e implacable. Por su parte, hay ciertos factores de riesgo que conllevan que sea más probable que se desarrolle una adicción, entre ellos la personalidad impulsiva que vimos en el artículo anterior y un sistema de creencias adictivo.
Entre estas creencias que predisponen a la adicción encontramos: «Yo debería ser perfecto (y la perfección es posible)». Si de veras creemos que es posible ser perfecto, entonces nunca podremos estar a la altura de las circunstancias.
«Yo debería ser todopoderoso». Un individuo que es vulnerable a la adicción también tiene ideas muy engañosas acerca de los límites de su poder, pues cree que él debería ser capaz no sólo de controlarse a sí mismo, sino de controlar a otras personas y a casi cualquier cosa. Esta ansia de control precipita a la gente a la adicción porque los alteradores del estado de ánimo más difundidos hoy en día crean la ilusión de poder y competencia, de ejercer control.
«Yo no soy bastante». Probablemente ninguna otra creencia sea más dolorosa y más eficaz para el desarrollo de la adicción que ésta, puesto que conduce a un absoluto rechazo del sí mismo, a la destructiva conclusión de que «el individuo que soy es alguien indigno de ser querido, no vale nada y no merece nada, y si esto se descubre todos me abandonarán.». Esta creencia básica se expresa a través de diversos pensamientos auto rechazantes tales como «no sirvo para nada», «soy malo», «soy egoísta», «soy un tonto». Luego, el adicto pasa todo lo que le sucede por el filtro de esta falsa creencia y basa en ella su conducta.
Los Traumas de la infancia y sus vínculos con la adicción
No obstante, ya sea para bien o para mal, estas creencias no surgen en el individuo de la nada, sino que surgen, como se ha planteado anteriormente, de traumas infantiles no tratados. Desarrollando esto, son muchos los progenitores que están transmitiendo valores adictivos, la imagen antes que la autenticidad, la ilusión antes que la realidad, el poder antes que la valía personal, el arreglo rápido antes que la solución de problemas, que ponen a sus hijos en peligro de convertirse en adictos.
Y es que, si bien es cierto que el componente fisiológico de algunas adicciones a sustancias químicas puede crearse a través de la reiterada exposición a la droga en una etapa posterior de la vida, el componente emocional de la adicción, el «mal-estar» adictivo, por lo general se desarrolla durante la infancia, nace directamente de las experiencias que tenemos en nuestras familias. Así, para muchas personas propensas a la adicción, lo trágico es que su hogar no fue un sitio en el que pudieran renovar la confianza en sí mismos, sino un lugar en el que su autoestima era atacada.
El rasgo más distintivo de la familia generadora de adicción es que deja sin satisfacer las necesidades de dependencia de sus hijos, no necesariamente por una desatención o un descuido manifiestos sino, lo que es mucho más frecuente, simplemente por no reconocer la realidad emocional del niño. Las familias incurren en esta omisión al transmitirle al hijo que «no está bien» tener ciertos sentimientos y percepciones. La consecuencia es que el niño aprende a reprimir su verdadero yo (su integridad y vitalidad emocionales) y erige en su lugar un falso yo.
Lecturas recomendadas sobre adicciones
En la búsqueda de comprender, superar y apoyar a quienes luchan contra las adicciones, la lectura puede ser una valiosa fuente de conocimiento y sabiduría. En esta sección, te ofrecemos una selección de lecturas recomendadas sobre adicciones, que abarcan una variedad de perspectivas. Explora estos posts que brindan conocimiento, apoyo y, sobre todo, inspiración para aquellos que desean comprender y abordar las complejidades de las adicciones.
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Recuerda que el primer paso hacia la recuperación y el cambio significativo es reconocer que necesitas ayuda. Consultar con un profesional especializado en adicciones puede ser el punto de partida para una vida más saludable y plena. No estás solo en este proceso, estamos aquí para acompañarte en cada paso del camino hacia la recuperación y el crecimiento personal.
